La Confirmación es un momento esencial en la vida de un cristiano, marcado por la recepción del don del Espíritu Santo. A través de este sacramento, fortalecemos nuestra fe y nos comprometemos más profundamente con Dios y con la comunidad de creyentes. El Espíritu Santo nos capacita para ser testigos valientes de Cristo en el mundo, guiándonos en nuestro camino de fe y ayudándonos a vivir de acuerdo con los valores del Evangelio. Al recibir la Confirmación, reconocemos la presencia activa del Espíritu Santo en nuestras vidas y nos comprometemos a abrir nuestros corazones a su guía y dirección. Es un momento de renovación espiritual y de crecimiento en nuestra relación con Dios.
En la Confirmación, además de recibir la fuerza del Espíritu Santo, también nos conceden sus dones para fortalecer nuestra fe y ayudarnos en nuestro camino cristiano. Estos dones, como la sabiduría, la fortaleza y el entendimiento, nos guían y nos capacitan para vivir de manera fiel a los enseñanzas de Cristo y para enfrentar los desafíos de la vida con valentía y confianza. Es a través de la acción del Espíritu Santo y estos dones que somos capacitados para ser verdaderos discípulos de Jesús en el mundo.
En nuestra parroquia, ofrecemos grupos de catequesis de Confirmación que se reúnen una vez a la semana para preparar a los jóvenes para recibir este sacramento. Estos grupos proporcionan un espacio de aprendizaje y reflexión donde los participantes exploran más profundamente su fe y reciben orientación en su camino hacia la Confirmación. Guiados por catequistas dedicados y comprometidos, los jóvenes tienen la oportunidad de crecer espiritualmente y de fortalecer su relación con Dios y la comunidad cristiana. Si deseas más información sobre cómo unirte a uno de estos grupos, no dudes en consultar nuestro apartado correspondiente en la página web.
